Aunque estamos acostumbrados a su presencia, son relativamente jóvenes en nuestro mercado laboral. Surgieron en 1994, cuando se aprobó una reforma laboral que permitía la contratación de trabajadores para ponerlos a disposición de otras empresas.
Claves del funcionamiento de una ETT
Una Empresa de Trabajo Temporal (ETT) es una entidad que se encarga de contratar trabajadores para que luego estos vayan a prestar sus servicios a otra empresa.
El éxito de estas entidades se ha debido en que consiguen ahorrarle mucho tiempo y dinero a las empresas en los procesos de selección.
Es la ETT la que se encarga de buscar a los trabajadores más adecuados para cada vacante. Los contrata, y los envía a trabajar a otras entidades que necesitan sus servicios. Así, las empresas que utilizan los servicios de una ETT, tienen la garantía de que van a cubrir sus vacantes temporales de forma rápida y efectiva.
Una relación entre tres partes
El funcionamiento de la ETT implica que se celebran dos contratos diferentes para cubrir un puesto de trabajo:
- Contrato de puesta a disposición. Es el que firman la ETT y la empresa que contrata sus servicios. Determina todas las particularidades de esta relación, como los servicios a prestar y el coste de los mismos.
- Contrato laboral. Se celebra entre la ETT y el trabajador que va a ser puesto a disposición de la empresa usuaria.
Obligaciones de las empresas
Tanto la ETT como la empresa usuaria asumen obligaciones con respecto a los empleados temporales.
La Empresa de Trabajo Temporal tiene que hacer frente a las obligaciones de contratación, altas y bajas en la Seguridad Social, pago de salarios y otros aspectos legales y administrativos de la relación laboral con el empleado.
Para determinar el salario del trabajador, se atiende al convenio que resulte de aplicación en la empresa en la que se van a prestar los servicios. Porque un empleado puesto a disposición debe cobrar lo mismo y disfrutar de los mismos derechos que un trabajador que forma parte de la plantilla de la empresa usuaria.
Además, hay obligaciones que son compartidas entre la ETT y la empresa usuaria:
- Cumplir con la normativa laboral en materia de Seguridad Social y fiscalidad.
- Ofrecer las mismas condiciones de seguridad y salud que disfruta la plantilla de la entidad que recibe al trabajador.
- Aportar formación a los empleados para que puedan desempeñar su trabajo.
- Prevención de riesgos laborales. Garantizando el acceso a formación, información y entrenamiento en materia de seguridad y salud en el trabajo.
- Asegurar el cumplimiento de la normativa sobre duración de la jornada laboral. Siendo la empresa usuaria la que tiene que controlar y registrar las horas de trabajo.
Proceso de selección en una Empresa de Trabajo Temporal
Para entender mejor el funcionamiento de una ETT, es necesario abordar el proceso de selección y contratación, que se desarrolla en varias fases.
En primer lugar, la empresa usuaria contacta con la ETT y le informa sobre el perfil que busca. Se firma entonces un contrato que define tanto el perfil del candidato, como el salario y otros detalles.
A continuación, la ETT crea una oferta de empleo y comienza la búsqueda dentro y fuera de su base de datos.
A lo largo del proceso de selección revisa los perfiles y va descartando aquellos que no encajan. En algunos casos, los candidatos preseleccionados por la ETT pasan también por una entrevista en la que será la empresa usuaria.
Una vez que la empresa que recibirá al empleado toma su decisión, la ETT procede a la contratación y a hacer el alta en la Seguridad Social.
A partir de ese momento surge una relación laboral entre la ETT y la persona contratada. De forma que es esta quien se encarga de abonarle su salario. Por su parte, la empresa usuaria debe pagar a la ETT el coste acordado por sus servicios.
Para la empresa usuaria, contar con los servicios de una ETT tiene un coste, pero lo compensa con el tiempo y el esfuerzo que ahorra en los procesos de selección. Porque así tiene la seguridad de que va a cubrir sus vacantes temporales de forma rápida y efectiva, con personal cualificado.
Para los trabajadores, la ventaja de trabajar a través de una ETT radica en poder acceder a múltiples ofertas de empleo. Así como la posibilidad de encontrar trabajo rápidamente y de poder llegar a convertirse en empleados permanentes en la empresa en la que han ido a prestar sus servicios.
El funcionamiento de una ETT no es complejo, pero es importante conocer las particularidades que se dan en su relación con los trabajadores y con las empresas usuarias. Si necesitas un socio estratégico para cubrir puestos temporales en tu empresa, puedes contar con Empatif.