¿Qué es el control de calidad?
Se trata de implementar mecanismos y procesos que sirvan para optimizar la calidad de los productos y servicios y para evitar posibles errores.
Pero ¿por qué es tan importante? La empresa se debe a sus clientes y si ofreces artículos de buena calidad, tus consumidores estarán satisfechos y seguirán demandando los mismos productos o servicios. Por el contrario, si dejan de estar contentos con lo que consiguen en tu empresa, se irán a la competencia, siendo esto un problema para ti y para tu equipo.
Es por ese motivo que se hace fundamental implementar controles de calidad para velar por el buen hacer de la empresa.
¿Qué se ha de tener en cuenta para hacer un buen control de calidad?
Cumplir las normativas
Lo primero, y un punto totalmente imprescindible, es establecer una política de calidad que cumpla con las normativas y la legislación vigentes. Por ejemplo, existe la norma ISO 9001, que se aplica a esta materia, y te interesará ajustarte a sus parámetros para conseguir la certificación. Esta es una garantía de calidad, y muchos clientes prefieren optar por compañías que la tienen.
Monitorización y pruebas
Si quieres mejorar la calidad de tus productos y servicios, tendrás que hacer pruebas para controlar los resultados. Estas serán necesarias al principio y al final del proceso, pero también durante su desarrollo para ver si vas por buen camino. En definitiva, los controles y pruebas son una forma de comprobar si, efectivamente, estás llegando donde quieres llegar.
Además, se tendrá que mantener un histórico de estas pruebas para saber si finalmente se ha producido o no una mejora. Es una manera de monitorizar los resultados a lo largo del tiempo.
Hacer partícipes a los empleados
Gran parte de estas funciones dependen del técnico de control de calidad y su equipo. Sin embargo, es importante que tengas siempre presente que una empresa depende de toda su plantilla. Como dice ISOTools:
Quienes llevan a cabo tales acciones son los integrantes de las empresas, cada uno en su papel y nivel jerárquico, aunque sin duda orientados e impulsados por la alta dirección y los jefes de departamento. (ISOTools, 2016)
Esto implica que habrá que crear una cultura empresarial en la que los empleados se impliquen con los mecanismos de control de calidad, impulsados desde arriba.
Estos son, a grandes rasgos, los aspectos que conciernen al control de calidad en una empresa. No obstante, te recomendamos que amplíes la información siempre que te sea preciso. Una de las fuentes que te interesará consultar, y cuya certificación puede interesarte, es la norma ISO 9001.